El chef Pedro Nel es un entusiasta de las cosas bien hechas. Este gran cocinero colombiano creció con los guisos de su madre y, hoy, suma a esa educación productos de temporada de las Islas Canarias y de la península para firmar grandes platos con una pincelada latina.
Pedro Nel, chef del restaurante Etéreo. Tenerife.
“Me aferro al producto de calidad. Esta es mi bandera”, dice Nel junto a la parrilla de carbón que tanta identidad da a la cocida de Etéreo.
El primer plato que corrió de boca en boca en Tenerife fue su revuelto de espinacas, garbanzos y jamón. Después llegaron las verduras canarias y los pescados, sus favoritos en la cocina, pero siempre con un ojo en la temporada para traer setas, espárragos, buena carne, faisán o lechazo, por ejemplo.
Un Sol Repsol, la recomendación de la Guía Michelin, importantes reconocimientos y la buena crítica de expertos y clientes refuerzan y ratifican hoy el trabajo del restaurante Etéreo, donde ceviches, empanadillas, steak tartar, croquetas o la tosta de foie con jamón ibérico de bellota son solo el comienzo de una fiesta gastronómica que, basada en el fuego, cocina exquisitos pescados locales, como el cherne (mero de roca), que se sirve con un puré de batata con leche de coco, o el bacalao con refrito de ajo, así como la chuleta de vaca vieja gallega o el solomillo de añojo con queso majorero. Sin olvidar su emblemática mesa de quesos o su bodega. También la calidad del servicio en sala, sublime.
Y por supuesto los postres, territorio de Nancy Viviana Sarria, que además de su magnífico trabajo con el chocolate y los helados, hay que destacar que le encanta utilizar vinos dulces para sus elaboraciones.
Y hablando de vinos, una de las cosas que más llama la atención al entrar en la acogedora sala de Etéreo son sus dos cavas acristaladas de vino que, junto a la cámara de carnes maduradas y esa mesa de quesos, componen el mejor interiorismo posible para cualquier gastrónomo.
A Pedro Nel le encanta visitar bodegas y en su casa ofrece hasta 300 referencias de vino que dan buen ejemplo de la importancia que él y su equipo dan a la experiencia que proponen.
Jerez es otro de los lugares favoritos de Pedro Nel: “El Palo Cortado, los Finos o la Pedro Ximénez, tienen un poder amplio y complejo que me gusta mucho. Hay que ser atrevido para darlos a probar. Al comensal le encanta que se los descubras”.
Hay que volver siempre a Tenerife.
El restaurante Etéreo está en la calle San Antonio, 63. Santa Cruz de Tenerife.